La parálisis cerebral y la parálisis de Erbs (o braquial) son dos de las más comunes lesiones al nacimiento que pudieran resultar al nacer. Tanto la parálisis cerebral como la parálisis de Erbs son con frecuencia el resultado de complicaciones durante el alumbramiento en si del niño, aunque la parálisis cerebral puede en ocasiones ocurre antes o algún tiempo después del alumbramiento.
Parálisis Cerebral
Parálisis cerebral es el término genérico para un número de desórdenes que afectan la función cerebral de un bebé así como sus movimientos corporales. La parálisis cerebral puede ser el resultado de una lesión al cerebro del bebé en el útero, durante el alumbramiento, o algún tiempo luego del nacimiento. Podía haber diferentes causas tales como la falta de oxígeno que pudiera suceder durante el alumbramiento de la madre.
Existen varios factores que pudieran contribuir a la lesión de nacimiento de un infante. Algunas situaciones que pueden causar o contribuir con la parálisis cerebral por lesión al nacimiento incluyen:
- El incumplimiento de un médico/obstetra tratante en reconocer la necesidad de proporcionar adecuado oxígeno al bebé, tales como por sección cesárea, o retraso irracional en llevar a cabo el procedimiento;
- El uso por parte de la madre de un medicamento de prescripción peligroso durante el embarazo;
- Sangrado prolongado en el cerebro del bebé después del alumbramiento, usualmente debido a trauma a la cabeza; y
- Nacimiento extremadamente prematuro.
Para las enfermedades y problemas comunes, son fáciles de terminar debido al hecho de que hay síntomas. Sin embargo, éste no es el caso para la parálisis cerebral.
Parálisis de Erbs (o Braquial)
La parálisis de Erbs (o braquial) es una lesión de nacimiento que ocurre en alrededor de dos por cada 1000 niños nacidos, en donde un bebé sufre lesión al plexo braquial. Esto consiste en el grupo de nervios que son relevantes para el viaje de la información en las extremidades, incluyendo las extremidades de la persona. La parálisis de Erbs sucede con mayor frecuencia durante el alumbramiento cuando se pone excesiva presión sobre la cabeza, cuello, u hombro del bebé debido a la dificultad en alumbrar el área del hombro (conocido como “distocia de hombro)”. La condición muy probablemente afectará a los infantes que tienen un peso por encima del promedio, conforme a lo registrado por las estadísticas médicas. El plexo braquial es simplemente estirado demasiado hasta qué nervios importantes son torcidos o rotos. Los síntomas de la parálisis de Erbs pueden incluir parálisis o flacidez en el brazo de un bebé, manos y dedos con movimientos limitados o inexistentes, y pérdida de sensibilidad en las manos y dedos. Con frecuencia el nueve simplemente mantendrá el brazo afectado muy cerca al cuerpo, y parecerá ser incapaz de mover por sí solo el brazo, las manos, o los dedos.
Las complicaciones de la condición conocida como parálisis de Erbs son típicamente el resultado del médico/obstetra tratante, quien:
- Incumple en reconocer que una sección cesárea debió haber sido llevada a cabo, en base al tamaño del bebé
- Incumple en alumbrar adecuadamente al bebé en situaciones que involucran “distocia de hombro”
- Uso de presión excesiva sobre la cabeza, cuello, u hombro del bebé durante el alumbramiento